Introducción
Definiremos el tratamiento integrado como aquel plan terapéutico que contempla el uso simultáneo de farmacoterapia y psicoterapia en pacientes con trastorno mental. Las conductas adictivas, ya sean químicas o comportamentales, han sido abordadas tradicionalmente desde un enfoque fundamentalmente psicosocial, la falta de voluntad del adicto condicionaba su tratamiento. Como consecuencia, ni se aplicaba la la farmacología disponible ni se desarrollaron ni adaptaron técnicas psicoterapéuticas. En la actualidad este panorama ha cambiado, han contribuido de manera decisiva los avances de las neurociencias, así como la descripción de los fenómenos del craving y priming.
El tratamiento integrado supone un gran esfuerzo tanto si lo aplica un único profesional como si lo proporcionan varios profesionales. Existen unas premisas en relación al tratamiento integral.
La importancia del tratamiento integral se refuerza por:
- No hay único tratamiento apropiado para todos los pacientes, por lo que se necesita la utilización conjunta de diferentes tratamientos
- Un tratamiento eficaz debe abarcar las múltiples necesidades de cada paciente
- El tratamiento individualizado debe revisarse y modificarse siempre que sea necesario para garantizar que el plan terapéutico se adecua a los cambios iniciales del paciente
- La retención en el tratamiento durante un periodo de tiempo adecuado es crítico para la efectividad. Este tipo de pacientes abandona tratamiento prematuramente por lo que se requiere la inclusión de estrategias, tanto farmacológicas como psicoterapéuticas para aumentar su adhesión al tratamiento
- El Consejo individual o en grupo y otras terapias de conducta son componentes esenciales, tanto para incrementar el nivel de concienciación del trastorno como para la capacitación en habilidades para hacer frente al consumo
- La medicación es un elemento importante en el tratamiento para muchos pacientes, especialmente cuando se combina con otras terapias de consejo o conductuales. En el caso de pacientes con comorbilidad psiquiátrica, tanto los tratamientos conductuales como farmacológicos puede ser de suma importancia
- La recuperación de la adicción es un proceso a largo plazo que requiere múltiples episodios de tratamiento, las recaídas puede ocurrir durante y/o después de un tratamiento eficaz
Objetivos de la farmacoterapia y psicoterapia
Objetivos de la farmacoterapia:
- Tratamiento de la fase de desintoxicación
- Manejo del deseo de consumo
- Manejo de la psicopatología asociada
- Alivio de los estados disfóricos que conducen al consumo
- Contención del paciente y capacitación de una mínima estabilidad
- Alivio y mejora de la impulsividad
- Tratamiento sustitutivo
- Mejora de la adherencia tratamiento psicoterapéutico
Objetivos de psicoterapia:
- Potenciar los niveles de adhesión
- Incremento de conciencia de enfermedad, de la motivación interna y la resolución del ambivalencia
- Informar sobre la estructura de la adicción tanto al paciente como a los familiares afectados
- Implementar el tratamiento psicoterapéutico oportuno en la psicopatología asociada
- Gestionar el control de la estimulación externa propiciatoria del deseo
- Implantación de las habilidades de afrontamiento del deseo
- Sustitución del estilo de vida del paciente en aquellas áreas poco adaptativas
- Adquisición de las estrategias para prevenir las recaídas
Tratamiento integrado en diferentes contextos terapéuticos
Por lo general, se recomienda en el tratamiento que se proporcione en el contexto menos restrictivo en el que se garantice un resultado eficaz y seguro. Tradicionalmente, en régimen hospitalario básicamente el abordaje era farmacológico, descuidando las técnicas motivacionales, por el contrario, en el tratamiento residencial el peso giraba fundamentalmente para las técnicas psicoterapéuticas. Como resumen podríamos concluir que para proporcionar un cuidado clínico óptimo, tanto los psiquiatras y médicos como los psicólogos deben evitar el reduccionismo biológico o psicosocial. El modelo de atención a los trastornos adictivos en nuestro país se basa en el modelo biopsicosocial, y los equipos de conductas adictivas son multidisciplinares, lo cual deja abierta la posibilidad de aplicar el modelo de uno o los dos profesionales.
Contextos de tratamiento
Tratamiento ambulatorio. Parece que el tratamiento integrado se produce con mayor fluidez en este contexto
Tratamiento hospitalario. Las estancias suelen ser breves, normalmente inferiores a un mes, con el objetivo o bien de desintoxicaciones parciales o bien de contribuir a su estabilización clínica
Régimen residencial. Indudablemente, en este contexto el pilar fundamental ha sido y continua siendo el abordaje psicoterapéutico. No obstante la utilización de farmacoterapia es esencial para facilitar la abstinencia, facilitar el control