Un objetivo cognitivo complejo importante es que los estudiantes sean capaces de aplicar lo que aprenden en situaciones novedosas.
¿Qué es la transferencia?
La transferencia se produce cuando una persona aplica experiencias y conocimientos previos al aprendizaje o a la resolución de problemas en una situación nueva. En consecuencia, si un estudiante aprende un concepto en la clase de matemáticas y luego lo aplica en la clase de ciencias, ha realizado una transferencia.
Algunos expertos sostienen que la mejor manera de asegurar la transferencia es enseñar a realizarla.
Tipos de transferencia
La transferencia puede caracterizarse por: 1) ser cercana o lejana, y 2) de orden inferior o de orden superior.
La transferencia cercana se produce cuando la situación de aprendizaje en el aula es similar a la correspondiente al aprendizaje inicial.
La transferencia lejana implica la transferencia del aprendizaje a una situación muy diferente a la correspondiente al aprendizaje inicial.
La transferencia de orden inferior se produce cuando el aprendizaje anterior se transfiere automáticamente, a menudo inconscientemente, a otra situación.
La transferencia de orden superior es consciente y exige un esfuerzo. Los estudiantes establecen, conscientemente, conexiones entre lo que han aprendido en una situación anterior y la nueva situación a la que se enfrentan. La transferencia de orden superior es reflexiva.
La transferencia hacia delante se produce cuando los estudiantes piensan cómo pueden aplicar lo que han aprendido a nuevas situaciones. Para que se produzca este tipo de transferencia, los estudiantes tienen que conocer algo sobre las situaciones a las que van a transferir el aprendizaje.
La transferencia hacia atrás se produce cuando los estudiantes piensan en una situación pasada para buscar información que les ayude a resolver un problema en el contexto nuevo.