Los exámenes tradicionales requieren de papel y lápiz y son pruebas en las que los alumnos seleccionan la respuesta entre varias opciones, hacen cálculos, elaboran respuestas breves o escriben ensayos.
Ítem de respuesta seleccionada
Los ítem de respuesta seleccionada tienen un formato objetivo que permite puntuar las respuestas de los alumnos rápidamente.
Un ítem de opción múltiple consta de dos partes: el encabezamiento y una serie de respuestas posibles.
En un ítem de verdadero/falso se pide al alumno que señale si un enunciado es verdadero o falso.
El ítem de emparejamiento, utilizado en alumnos de menor edad, requiere conectar correctamente un grupo de estímulos con otro. Un profesor coloca una serie de términos en el margen izquierdo de la hoja y la descripción en el derecho. La tarea del alumno es trazar líneas entre las columnas que unan correctamente los términos.
Ítem de respuesta elaborada
Los ítem de respuesta elaborada exigen que los alumnos escriban la información, en lugar de que seleccionen una respuesta de un menú.
Un ítem de respuesta breve es un formato de respuesta elaborada en el que se pide al alumno que escriba una palabra, una frase breve o varias frases para responder a una pregunta.
Los ítem de ensayo dejan a los alumnos más libertad para responder a las preguntas, pero requieren más escritura que los otros formatos.
Algunas recomendaciones para escribir buenos ítems de ensayo incluyen los siguientes:
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Especificar las limitaciones.
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Estructurar y aclarar la tarea.
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Plantear peguntas de manera directa.