El modelo del pensamiento grupal se desarrolla a partir del análisis de los fracasos en la toma de decisiones que dieron lugar a notorios fracasos.
La noción de pensamiento de grupo y el correspondiente modelo de toma de decisión en grupos (Janis) se basa en el análisis de una serie de decisiones por parte de grupos de alto nivel de liderazgo político en los EE.UU.
En cuanto a la definición de pensamiento grupal, Janis (1972) propone la siguiente:
«Uso el término «pensamiento grupal» como una forma rápida y fácil de referirme a un modo de pensamiento que tiene la gente cuando están profundamente implicados en un grupo cohesivo, cuando los esfuerzos de los miembros por la unanimidad superan la motivación por evaluar realistamente los cursos de acción alternativos (...) El pensamiento grupal se refiere a un deterioro de la eficacia mental, de la contrastación de la realidad y del juicio moral como resultado de las presiones del propio grupo»
En esencia el pensamiento de grupo consiste en la búsqueda del acuerdo por encima de todo.
Los cuatro casos que inicialmente fueron analizados y sirvieron como base para el desarrollo del modelo de Janis (1972) fueron los siguientes:
- La decisión del Admirante Kimmel y sus asesores a cargo de la flota de Estados Unidos de Pearl Harbour en 1941 de centrarse en el entrenamiento de las fuerzas en lugar de en la defensa, a pesar de las señales de la probabilidad de un ataque japonés;
- La decisión del presidente Truman y sus consejeros del escalamiento de la guerra en Corea a través de cruzar el paralelo 38 en 1950
- Las decisiones de Kennedy y sus asesores de la fallida invasión de Bahía de Cochinos en Cuba 1960
- El escalamiento de la Guerra de Vietnam por parte de Johnson entre 1964-67.
También se incluían dos casos en los que no se había producido el pensamiento de grupo:
- El Plan Marshall de ayuda a Europa tras la II Guerra Mundial y la Crisis de los Misiles en la que Kennedy y sus asesores se enfrentaron con el posible armamento de Cuba con misiles soviéticos.
- La decisión de Nixon y sus asesores sobre el caso Watergate, que supuso el encubrimiento de la implicación de la Casa Blanca en el robo del cuartel general de los demócratas en el hotel Watergate.
Según se advierte el modelo incluye tres grupos de variables:
- Antecedentes que influyen en la necesidad de llegar a toda costa al acuerdo de grupo
- Síntomas de que se está dando el pensamiento de grupo
- Defectos en la toma de decisión.
Antecedentes
Janis supone que la cohesión del grupo que toma la decisión, el «esprit de corps», es un determinante que juega un papel importante, suponiendo que los grupos que adoptaron las decisiones tenían un nivel de cohesión de moderado a alto. Janis matiza que es una condición necesaria pero no suficiente para que se produzca el pensamiento grupal, por lo que deberá interactuar con los otros antecedentes.
Defectos estructurales de la organización:
- El aislamiento del grupo que no se encuentra bajo el control o la evaluación de otros miembros de la organización.
- Ausencia de normas de procedimiento de carácter metodológico para la toma de decisión, como la búsqueda de la información relevante, el examen de otras alternativas a la opción preferida o la revisión de las posibles consecuencias de ésta.
- Falta de una tradición de liderazgo imparcial por lo que los líderes promueven su preferencia en la decisión sin establecer ninguna cortapisa. Esto se ha denominado también liderazgo promocional.
- Homogeneidad del grupo en cuanto a sus características sociales y a su ideología.
Contexto situacional provocativo caracterizado tanto por amenazas externas como por otras de naturaleza interior. Aquí se incluye:
- El alto grado de estrés suscitado por una amenaza externa con escasa posibilidad de llegar a una solución alternativa distinta a la que propone el líder.
- Baja autoestima del grupo por fracasos recientes en tomas de decisión, por la dificultad intrínseca de la tarea a abordar, o porque no existen alternativas moralmente correctas.
Síntomas
Resultan autodescriptivos y pueden clasificarse a su vez en tres grupos:
- Superioridad del grupo que toma la decisión: están la ilusión de que el grupo es invulnerable y no puede fracasar en su cometido, y la creencia de que el grupo es inherentemente moral.
- La cerrazón mental: se incluyen las racionalizaciones para desestimar los avisos o el feed-back negativo en contra de la decisión y el difundir visiones estereotipadas de los miembros de los grupos oponentes.
- La relación de desprecio hacia otros grupos o las presiones para mantener la uniformidad dentro del grupo: se consideran la presión sobre los disidentes para cortar sus críticas, la autocensura de forma que los integrantes del grupo no expresan sus dudas acerca del plan, la ilusión de unanimidad y la aparición de los «guardianes de la mente» que actúan como protección del grupo frente a la información adversa.
Defectos en la toma de decisión
Janis (1982) señala:
- Insuficiente consideración de alternativas y objetivos que a menudo se limitan a la consideración de la alternativa preferida inicialmente
- Insuficiente análisis de los riesgos que conlleva esa elección
- No se llega a hacer una reevaluación de las alternativas rechazadas inicialmente
- Insuficiente búsqueda de la información relevante
- Sesgos en el procesamiento de la información
- No se desarrollan planes de contingencia para el caso en que los riesgos que se anticipan se hagan realidad.