Blog de Psicología
Hoy vas a reducir el consumo de tabaco y a preparar el día de mañana.
Hoy es el primer día del resto de nuestra vida. ¿Cómo será lo que nos queda de vida?. Podemos hacer que sea mejor... y lo vamos a hacer!!
Eres libre, ahora eres del equipo de los no fumadores, vas a ver qué fantástico es!!
Cuando la gente se enfrenta a experiencias traumáticas desarrolla formas de enfrentar las pérdidas y las situaciones peligrosas y desafiantes. Esas formas de afrontamiento pueden ser más o menos positivas dependiendo del contexto y la persona, y pueden variar según la edad y la posición social.
Las catástrofes y los hechos traumáticos alteran profundamente el conjunto de creencias esenciales que las personas tienen sobre sí mismas, el mundo y los otros (Janoff–Bulman, 1992).
En una investigación sobre los efectos de un terremoto en Perú se encontraron los siguientes tipos de víctimas o afectados: las víctimas físicas directas, las víctimas contextuales (traumatizadas por las condiciones físicas y socioculturales después del impacto), víctimas periféricas (no residentes que han sufrido pérdidas) y las víctimas de “ingreso” (voluntarios y agentes de ayuda, que sufren del estrés psicosocial y de las condiciones físicas post–catástrofes) -Oliver–Smith, 1996-.
En la fase previa al impacto del hecho negativo o catástrofe (inundación, epidemia o pandemia) y en sus primeras etapas, es muy frecuente que las autoridades y la colectividad nieguen o minimicen la amenaza. Uno de los errores más frecuentes durante la fase previa a las catástrofes es el sesgo de normalización: las autoridades suelen ocultar o minimizar la información amenazante, aunque se esté al borde de la catástrofe.
Ante situaciones de riesgo, tensión o cambio, debidas tanto a factores ambientales como a factores sociales, se desencadenan una serie de conductas y emociones colectivas (Ovejero, 1997). Estas conductas colectivas se refieren a la emergencia de las conductas sociales extra–institucionales, que se manifiestan cuando hay situaciones nuevas o excepcionales ante las cuales las definiciones sociales de lo que hay que hacer son inexistentes o insuficientes (Lofland, 1981; Smelser, 1986; Rushing, 1995).
Las salidas profesionales del Graduado en Psicología interesan no sólo a los Psicólogos y estudiantes de último curso, sino también a aquéllos que están pensando en comenzar esta carrera.
No. Si ya has cursado anteriormente estudios universitarios, se tendrá en cuenta el rendimiento académico obtenido en el último curso realizado de esos estudios, independientemente del tiempo transcurrido y de que los hayas realizado en otra universidad.
Tienen que solicitar Admisión:
Alumnos procedentes de otras Universidades:
No hace falta matricularse de un curso completo.
Si eres Licenciado o Diplomado, puedes convalidar todos los créditos de libre elección de la carrera.
Si tienes asignaturas sueltas de otra carrera puedes convalidar el número de créditos que te corresponda.
Si te has matriculado y, por la razón que sea, quieres cambiar una asignatura por otra, no tienes más que hacer un escrito dirigido al Ilmo. Decano o Director de tu Facultad o Escuela,
Un error frecuente es coger demasiadas asignaturas el primer año.
NO es obligatorio asistir a ninguna tutoría o clase presencial en la UNED.
Las Pruebas de Evaluación Contínua (PECs) son ejercicios relacionados con la asignatura que pueden ser Optativos (sólo sirven para subir nota) u Obligatorios (imprescindibles para poder presentarse al examen).
Hay asignaturas que no permiten llevar ningún material al examen, otras en las que sólo se puede llevar el programa de la asignatura (ojo el programa oficial que se puede descargar del curso virtual o las páginas oficiales) sin subrayar y sin anotaciones e incluso algunas asignaturas en las que se pueden llevar los libros y apuntes.
Los tribunales de los exámenes han de tener un Acta de Incidencias para reflejar cualquier problema (láminas que no se entregan a tiempo, disponer de menos tiempo del estipulado (2 horas habitualmente),