Los TRC se pueden utilizar para dos tipos de objetivos: la estimación de la puntuación dominio de los sujetos, y el establecimiento de estándares mediante puntos de corte (tests de maestría).
El segundo enfoque es el más utilizado, se considera un test fiable si, tras su aplicación a los mismos sujetos en distintas ocasiones, o la aplicación de dos formas paralelas, se clasifica a los sujetos siempre en la misma categoría.
Los siguientes métodos pueden dividirse en: los que requieren dos aplicaciones del test, y aquellos que sólo requieren una aplicación.